TRES CONCEPTOS QUE PUEDEN MEJORAR EL ESTILO PROFESIONAL:
HABILIDADES, DESTREZAS Y ESTRATEGIAS PSICOLÓGICAS
Uno de los grandes propósitos
que debe unir a los psicólogos del deporte, es luchar por el avance de la
profesión, para convertirla en una ciencia reconocida por su aporte objetivo y
trascendente en el desarrollo mental y emocional de los deportistas.
En el apropiado
desempeño podría estar una de las claves para que el estatus que se merece la
profesión, sea alcanzado. Posiblemente, muchos psicólogos del deporte están
convencidos de que la mejor manera de ejercer su rol es a través del cruce de
diálogos terapéuticos que pueden activar esas vivencias sensibles que movilizarán al deportista hacia sus mejores
actuaciones. Y puede que exista una dosis de razón en esta forma de interpretación
debido a que está interviniendo sobre habilidades psicológicas inherentes al comportamiento
humano. No obstante, abusar de este estilo, podría generar rótulos
inconvenientes como convertirse en el mejor amigo del deportista, o ser
identificado como un psicólogo de consultorio, de escritorio o de pasillo que
proporciona buenos consejos y nada más…O que simplemente, ¡el deportista ve cuando ocasionalmente se encuentran o visita su sitio
de atención!
El estilo de
intervención basado exclusivamente en la terapia verbal, genera en el
profesional una zona de confort, que lo limitará en el ejercicio de la
psicología aplicada al deporte. Este modo, deberá complementarse con un rol más
activo, que busque el fortalecimiento de las destrezas psicológicas y mejore
las inherentes habilidades psicológicas del deportista. Para que esto sea posible, el profesional,
debe hacerse a un buen banco de técnicas y protocolos que le facilite
estructurar una intervención metódica, programada y eficiente con efectos
positivos en el desempeño psicológico del deportista. Por supuesto, en la
literatura se encontrará muchas técnicas de intervención que sabiamente deberá
incluir en su repertorio; aunque son escasas las fuentes que muestran
protocolos de intervención adecuados. ¡Se encuentran muchas técnicas, pero
pocos protocolos! ¿Qué hacer al respecto? Esto simplemente debe tomarse como
una oportunidad, y es sencillo, el psicólogo del deporte deberá elaborar protocolos
y darle una distinción particular a su desempeño profesional.
Involucrarse
en la enseñanza de las destrezas psicológicas es un paso necesario que puede
generar dificultades. Si es un
profesional, que solo vive en la carrera consumista de sumar empleos o de hacer
lo estrictamente necesario para cumplir con la labor, difícilmente, podrá
comprometerse con el desarrollo de las destrezas psicológicas que beneficien el
desempeño mental y emocional de los deportistas bajo su orientación. Y si esto
pasa, la labor podría catalogarse como deficiente en lo ético y en lo
profesional.
Los psicólogos del
deporte deben liberar lo mejor de su pensamiento creativo para construir,
aplicar y validar los protocolos de intervención. Los deportistas se sentirán
especiales y percibirán la seriedad con que el profesional asume la labor. Por
supuesto, en este camino se encontrará algunos deportistas que por causa de su
pereza mental, les será difícil plegarse a este tipo de intervención. Posiblemente,
pueden ser aquellos que se han acomodado a los efectos mínimos de la terapia
verbal y que no están dispuestos a dar un esfuerzo diferente para fortalecer su
comportamiento psicológico. Así como también, se encontrarán otros deportistas,
que el profesional ha sensibilizado, en la importancia del entrenamiento de las
destrezas psicológicas; sin interesar el número de sesiones que se requieran.
Pero la pereza
mental no es exclusiva de los deportistas, también podría afectar a aquellos
profesionales que les falta la paciencia y disciplina para dedicarse en varias
sesiones al entrenamiento de las destrezas psicológicas. Como muestra de la
autocritica los psicólogos del deporte deben preguntarse: ¿Cuántas técnicas
psicológicas conozco? ¿Cuántas manejo y aplico de manera apropiada? ¿Cuántos protocolos
conozco? Y más importante aún ¿Cuántos protocolos
he diseñado, aplicado y validado últimamente? En fin, si el profesional se
encamina por el entrenamiento de las destrezas psicológicas, será reconocido
como el psicólogo que además de dar buenos consejos, se involucra decididamente
en mejorar el desempeño mental y emocional de los deportistas que orienta. ¡Dejará de ser el psicólogo que consultan y
visitan de vez en cuando, solo para charlar!
La terapia verbal y
el entrenamiento en destrezas psicológicas están lejos de convertirse en el
punto final de la labor. Al contrario, estos dos estilos de intervención deben concluir
en el desarrollo de las estrategias psicológicas que el deportista empleará
para afrontar con fortaleza mental sus entrenamientos y competencias. Es claro,
que paralelamente, sucederá la transferencia de lo aprendido a la realidad de la
actuación deportiva. Sin embargo, si se desea elevar el efecto psicológico, es
necesario realizar intervenciones de campo conducentes a transformar las
destrezas en estrategias efectivas de afrontamiento. Esto le deberá dar un nuevo
sentido a la presencia del profesional en la zona de entrenamiento, ya que se
pasará del rol habitual de observador pasivo, al rol del profesional que aplica
de forma efectiva la psicología para aportar en el desempeño del
deportista. Luego, será importante y
necesario que estas estrategias las utilice el deportista de forma automática en
la competencia, ojalá, con el acompañamiento del psicólogo del deporte, que
podría obtener información prioritaria para continuar en el afianzamiento del
desempeño mental y emocional del deportista.
¿Quiere convertirse en el profesional
que el deportista consulta y requiere de forma permanente con el propósito de
mejorar su rendimiento psicológico? En conclusión, el
consejo es muy sencillo: desempéñese de forma equilibrada de acuerdo a los tres
estilos: terapia verbal, moderada y sin caer en el amiguismo; entrenamiento
metódico, programado y eficiente de las destrezas psicológicas, y por último;
fortalecimiento de estrategias psicológicas con una participación activa en los
entrenamientos y competencias.
MSc. Luis Humberto Serrato H.